Segundo trabajo en la discografia de Judas Priest y primero con un nuevo sonido, uno que se volvería marca de la casa y que sería una influencia para futuras generaciones. Antes de dar inicio a la crítica mencionar una curiosidad acerca del lanzamiento de este disco, y es que en la versión de Gull Records había un error de impresión (o eso se cree) en el cual se invertían el orden de las canciones. Según el listado de la versión de Gull Records el disco inicia con el tema "Prelude" y cierra con "Deceiver", pero en futuras re-ediciones en CD el disco inicia con "Victim Of Changes" y cierra con "Prelude", la versión en vinilo también tiene ese orden y de hecho en la discografía oficial el disco arranca con ese tema. Para algunos el verdadero orden es el que Gull sugería, un tema discutido por aquellos que lo escucharon en su época.
Aclarando esto la versión que yo poseo de este disco es la que hace unos 12 años editó Koch Records. El disco venía en un boxset que incluye "Rocka Rolla", "Sad Wings Of Destiny" y el recopilatorio "Hero, Hero" que incluye el "Rocka Rolla" y unos 6 temas de "Sad Wings...". Por lo tanto, si poseen las versiones originales por parte de Gull Records esta edición no vale la pena ni por asomo salvo que seas un completista o bien no tengas los discos. También existe una edición en Picture LP de la cual yo (orgullosamente) poseo una copia. Incluso en una declaración oficial por parte de la banda se insta a los fans a no adquirir el "Hero, Hero" ya que lo consideran un intento de capitalizar la popularidad de Judas Priest (sic).
Como dije líneas arriba el disco arranca con "Victim Of Changes", un tema que lo tiene todo, desde gritos a tope por parte de un Halford pletórico, riffs puntiagudos, hasta un excelso solo de guitarra. Esa parte a mitad de la canción que se transforma en una dulce melodía sirve para dar paso a uno de los mejores momento no solo del disco, sino en la carrera de la banda con un Halford gritando a tope "Victim Of Changes!!!!!!" algo que es y seguirá siendo recordado con el paso de los años por la legion de fans alrededor del mundo y que hizo que este disco se volviera un clásico. Rápidamente hace su aparición "The Ripper", un tema que cuenta las andanzas de uno de los seriales más famosos de Inglaterra: Jack el Destripador. A pesar de ser un tema corto es muy efectivo, su estridente inicio nos toma por asalto después del dulce final de "Victim...". Esta canción tiene esa fórmula que la banda ha mantenido a lo largo de su carrera, un coro fácilmente reconocible y que se te queda grabado en la mente, a pesar de no saber la letra completa el coro es lo que más recuerda uno y si han tenido la oportunidad de asistir a algún concierto de los Metal God´s sabrán de lo que hablo. Creo que no hay tema donde la gente no cante el coro.
"Dreamer Deceiver" es un tema que va por los terrenos más melódicos de la banda y que data de la época de Atkins, al igual que "Victim...". Un tema perfecto por donde se le vea y que para muchos es una reminiscencia de unos Black Sabbath más tranquilos. Pero conforme avanza parece ir congiendo fuerza para engancharse de forma magistral y natural con "Deceiver", un tema que cabalga más a medio tiempo pero con paso firme, el mismo con el que el Heavy Metal ha marchado hasta nuestros tiempos. "Prelude" es un tema instrumental preciosista, compuesto e interpretado por Tipton en piano y guitarra solista cuyo abrupto final sirve de entrada para "Tyrant" otro gran clásico en la carrera de Judas Priest. Otro corte rápido y que tiene ese sonido básico del Heavy Metal con un duelo de guitarras muy inspirado, aquí escuchamos a Halford doblando voces en algunas partes. Muy buen tema.
"Genocide" sigue la línea pero por alguna razón recuerda un poco al sonido en "Rocka Rolla", tal vez sea por ese sonido de bajo de Hill o el riff de guitarra, suena muy setentero. Curioso ese interludio con una voz en off donde en una estrofa se menciona lo que se volvería el titulo de su siguiente disco: Sin after sin I have endured Yet the wounds I bare are the wounds of love. Un corte muy Zeppelin, Hendrix o Purple. "Epitaph" es un tema atípico que puede recordar a Queen pero sin tanta teatralidad. Aquí Halford canta de manera melosa una triste balada acompañado de un melancólico piano con coros de fondo, definitivamente recuerdan a Queen. Pero eso no lo quita mérito a la canción, es todo un placer para el oido escucharlo. Cierra "Island Of Domination", otro potente tema que mantiene el nivel del disco. Un gran trallazo y ejemplo de buen Heavy Metal. Después de este disco la banda seguiría la línea pero a pesar de eso, no hay disco que suene igual por muy extraño que esto se lea. "Sad Wings Of Destiny" es un gran clásico y es el disco que plantaria las raíces del género. De escucha obligatoria para todo aquel fan del Heavy Metal y de la banda.
Aclarando esto la versión que yo poseo de este disco es la que hace unos 12 años editó Koch Records. El disco venía en un boxset que incluye "Rocka Rolla", "Sad Wings Of Destiny" y el recopilatorio "Hero, Hero" que incluye el "Rocka Rolla" y unos 6 temas de "Sad Wings...". Por lo tanto, si poseen las versiones originales por parte de Gull Records esta edición no vale la pena ni por asomo salvo que seas un completista o bien no tengas los discos. También existe una edición en Picture LP de la cual yo (orgullosamente) poseo una copia. Incluso en una declaración oficial por parte de la banda se insta a los fans a no adquirir el "Hero, Hero" ya que lo consideran un intento de capitalizar la popularidad de Judas Priest (sic).
Como dije líneas arriba el disco arranca con "Victim Of Changes", un tema que lo tiene todo, desde gritos a tope por parte de un Halford pletórico, riffs puntiagudos, hasta un excelso solo de guitarra. Esa parte a mitad de la canción que se transforma en una dulce melodía sirve para dar paso a uno de los mejores momento no solo del disco, sino en la carrera de la banda con un Halford gritando a tope "Victim Of Changes!!!!!!" algo que es y seguirá siendo recordado con el paso de los años por la legion de fans alrededor del mundo y que hizo que este disco se volviera un clásico. Rápidamente hace su aparición "The Ripper", un tema que cuenta las andanzas de uno de los seriales más famosos de Inglaterra: Jack el Destripador. A pesar de ser un tema corto es muy efectivo, su estridente inicio nos toma por asalto después del dulce final de "Victim...". Esta canción tiene esa fórmula que la banda ha mantenido a lo largo de su carrera, un coro fácilmente reconocible y que se te queda grabado en la mente, a pesar de no saber la letra completa el coro es lo que más recuerda uno y si han tenido la oportunidad de asistir a algún concierto de los Metal God´s sabrán de lo que hablo. Creo que no hay tema donde la gente no cante el coro.
"Dreamer Deceiver" es un tema que va por los terrenos más melódicos de la banda y que data de la época de Atkins, al igual que "Victim...". Un tema perfecto por donde se le vea y que para muchos es una reminiscencia de unos Black Sabbath más tranquilos. Pero conforme avanza parece ir congiendo fuerza para engancharse de forma magistral y natural con "Deceiver", un tema que cabalga más a medio tiempo pero con paso firme, el mismo con el que el Heavy Metal ha marchado hasta nuestros tiempos. "Prelude" es un tema instrumental preciosista, compuesto e interpretado por Tipton en piano y guitarra solista cuyo abrupto final sirve de entrada para "Tyrant" otro gran clásico en la carrera de Judas Priest. Otro corte rápido y que tiene ese sonido básico del Heavy Metal con un duelo de guitarras muy inspirado, aquí escuchamos a Halford doblando voces en algunas partes. Muy buen tema.
"Genocide" sigue la línea pero por alguna razón recuerda un poco al sonido en "Rocka Rolla", tal vez sea por ese sonido de bajo de Hill o el riff de guitarra, suena muy setentero. Curioso ese interludio con una voz en off donde en una estrofa se menciona lo que se volvería el titulo de su siguiente disco: Sin after sin I have endured Yet the wounds I bare are the wounds of love. Un corte muy Zeppelin, Hendrix o Purple. "Epitaph" es un tema atípico que puede recordar a Queen pero sin tanta teatralidad. Aquí Halford canta de manera melosa una triste balada acompañado de un melancólico piano con coros de fondo, definitivamente recuerdan a Queen. Pero eso no lo quita mérito a la canción, es todo un placer para el oido escucharlo. Cierra "Island Of Domination", otro potente tema que mantiene el nivel del disco. Un gran trallazo y ejemplo de buen Heavy Metal. Después de este disco la banda seguiría la línea pero a pesar de eso, no hay disco que suene igual por muy extraño que esto se lea. "Sad Wings Of Destiny" es un gran clásico y es el disco que plantaria las raíces del género. De escucha obligatoria para todo aquel fan del Heavy Metal y de la banda.
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