Creo que al igual que toda la gente en el país, yo también tengo miedo al salir todos los días a mi chamba. Miedo a que me asalten, me secuestren, me violen (bueno más que a eso es miedo a que me guste), a que me quiten lo del pasaje, a que me cague encima una paloma, a llegar tarde a la chamba, etc, etc. Por lo tanto me he visto en la necesidad, enorme por cierto, de contratar a un bodyguard (hay guey, los dejé de a seis verdad. Ni el pinche López Doriga), así que si me ven en la calle antes de acercarse como normalmente lo hacen, tomen cautela no vaya a ser que mi nuevo guardaespaldas les meta un plomazo en cumplimiento de su deber. El cabrón es un poco gatillo fácil así que por favor no le den motivos para partirles su mandarina en gajos, avisados están. Les anexo una foto de mi chalan, nomás me va a faltar el Fucktrimóvil:
lunes, 4 de abril de 2011
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