sábado, 1 de enero de 2011

Metal In The Forest: El Viaje

Fue como a mediados de Septiembre de 2010 que se empezó a anunciar este festival, el primero de su tipo en México. El primer festival de metal al aire libre, el Metal In The Forest. Desde que apareció el primer cartel oficial inició la controversía y los rumores acerca de la veracidad de dicho festival, a pesar de que Chas ha organizado una buena cantidad de eventos en nuestro país su reputación no es muy buena, sobre todo en los últimos meses del año pasado.

Cancelación de eventos, mala organización, desinformación, engaños por parte del promotor tanto para las bandas como para la gente que asiste a sus eventos son el tipo de cosas que de alguna manera hacian dudar si este evento llegaría a buena puerto. De entrada, se antojaba, el cartel pintaba bien así como el lugar donde se llevaría a cabo: En pleno bosque. Los cambios en el cartel no se hicieron esperar, algunas de las bandas que se anunciaban al poco tiempo cancelaban o tal vez no aceptaban la invitación al festival, es algo que no sabremos, lo cierto es que cosas como esas hacen pensar a uno si es buena idea asistir al evento. Pronto empezó a salir más información del festival, las actividades que se realizarían como parte del fest, los puntos de preventa donde adquirir boletos, como llegar al citado lugar y otros servicios extras como transportación proporcionada por los mismos organizadores. Sin embargo las dudas eran muchas, yo mismo tenía algunas y aunque contacte a la organización a uno de sus contactos nunca tuve respuesta. No fui el único, y con el pasar de los días fui recopilando información sobre todo por aquello de que habría la oportunidad de acampar en la zona, algo que me resultaba atractivo ya que para mi la oportunidad de vivir una experiencia así me llamó poderosamente la atención, claro era un plus al cartel de bandas anunciadas.

Fue casi a finales de Octubre cuando adquirí mi boleto, ya un poco predispuesto por que como dije antes, la organización no tiene muy buenas referencias pero me dije a mi mismo que si alguna banda cancelaba pues al menos trataría de pasarmela bien estando allá. De mi parte iba con ganas de ver a Grave, Impaled, Monstrosity y Vader y no me causo ni sorpresa ni enojo cuando un día antes del evento se anunció la cancelación de los blackers Satanic Warmaster a través de la misma gente que iba a asistir al festival. Fue así como después de arreglar los permisos pertinentes en el trabajo (a quien engaño, fue con la castigadora) inicié la logística para mi estancia y traslado hasta el Valle de las Monjas. Llegué al DF a las 8:00 am del Sábado 04 de Diciembre, después de buscar un lugar donde descansar un momento y desayunar algo me dispuse a dirigirme al Tianguis del Chopo, ese lugar de reunión para muchos bangers mexicanos tanto de la ciudad como de los que llegan de provincia pero que últimamente como que ha decaído un poco, a mi parecer. Ahí me tope con mi buen amigo Cesar, quien me hizo el enorme favor de adquirir mi boleto en preventa ya que de las promociones para gente de provincia que anunció la organización nunca me enteré, pero en fin. Eran ya las 10:30 de la mañana aproximadamente, al llegar al Chopo del lado del metro Buenavista estaba estacionado el camión que la organización puso a disposición de los que quisieran para trasladarse al Valle de las Monjas, claro por un módico precio te ofrecían la comodidad de llevarte al lugar y al día siguiente regresarte a la Ciudad de México al lugar donde tomaron el bus.

Me dí el lujo todavía de ver algunos artículos en el Chopo, buscar algunos disquitos para mi colección y echarme una platicada con algunas personas que he conocido en mis visitas anteriores. Ya era alrededor de mediodía cuando me puse a buscar a mi cuate, fue ahí en la zona de trade donde nos reunimos, todavía nos echamos una platicada con otras personas y cuando ví que ya eran casi las 2 de la tarde nos marchamos rumbo a Tlalneplanta donde vive este cabrón, yo la verdad ya iba con intenciones de llegar algo tarde al evento puesto que ya me habían hecho saber que se había retrasado el inicio del festival y ver todavía el bus estacionado buscando gente que fuera al Valle confirmó la información. Ya en casa de mi cuaderno pues no podían faltar las chelas Indio, bien frías eso si, la platicada de rigor y aproveché a acomodar mis cosas y seleccionar lo que me llevaría al festival ya saben, frazada, la sleeping bag, mi tienda de campaña, lámpara, comida enlatada, ropa, sudadera, playeras, bufanda, cámara, baterías cargadas pero sobre todo muchos ánimos. Fue cuando a eso de las 3 o casi 4 cuando salí rumbo a Observatorio para seguir las indicaciones de como tomar transporte al Valle, ya en la estación me puse a buscar la línea que va por la zona. Honestamente ya estaba desesperado por llegar, por que a pesar de que me dije que no me importaba tanto llegar tarde creo que si me manche para agarrar rumbo a pesar de que mi cuate me dijo que ya le habían dicho que apenas iba a iniciar.

Pero como el evento estaba programado para iniciar a las 12 del sábado, pues ya las 4 de la tarde si es algo de tiempo considerable pero de alguna manera me calmaba el hecho de que el bus salió igual tarde del Chopo, en fin. Ya estando en la terminal busqué el bus que iba casi de salida, ya a bordo ví a un grupo de cabrones que igual se dirigía al festival, ya ahí cruzamos algunas palabras y para mi suerte una persona que iba a mi lado que vive en un pueblito más adelante de la Marquesa al escuchar que venía de Tabasco fue amable y me dijo que me iba a indicar el lugar donde bajarme. Total que salió el bus de la estación y después de más de una hora de viaje, debido al tráfico que había a esa hora, me dijeron donde bajar justo frente a un Conalep y ya me indicaron cruzar por un puente peatonal y caminar hacía una entrada a un camino de terracería. Ya por la hora estaba comenzando a oscurecer, ví una pareja y le volví a preguntar para estar seguro por que a pesar de que esos chavos (que para su suerte me dijeron donde bajarme por que ni ellos tenían idea) que me topé eran varios pues yo me adelanté por que estaban un poco indecisos en seguirme. No mamen, ya ahí ni idea de a donde seguir, pero me aventuré a seguir por el camino sin desviarme ya sentía pesada la mochila quizás por la altura, por que igual mi respiración se hizo algo agitada. De repente a lo lejos, ví movimiento y saqué una lámpara, volteé a ver a esos cuates que venían de trás de mi y caminaban muy lento, por un momento pensé que era alguien esperando a quien atracar jajajaja o una manada de lobos pero nel pastel, eran varios chavos que venían caminando que al igual que nosotros estaban buscando el sitio donde sería el fest.

Fácil, eran como 20 cabrones perdidos que ya tenían rato caminando, prácticamente cruzaron el Valle de extremo a extremo y no habían encontrado la entrada. Uno de ellos que por cierto venía desde Cancún, me dijo que habían visto gente acampando pero que era otro desmadre. Les dije que mejor se regresaran por que si seguían caminando saldrían de nueva cuenta a la carretera, otros que venían por ese mismo camino no me hicieron caso, se les veía molestos, y optaron por retirarse me comentaron que ya llevaban largo rato buscando, que se escuchaba el sonido pero no lograban divisar el lugar. Incluso que habían visto vagando por las pequeñas laderas y caminos que se veían a otro grupo de gente, se habían metido por ahí pensando que ese era el camino pero tampoco daban con el lugar. Muchos me confesaron sentirse inseguros ahí, les pregunté que por qué no habían hecho lo mismo, y dijeron que ni locos se aventaban sólos, ciertamente si estaba cabrón estar ahí a oscuras pero al juntarse un poco más de banda los convencí de que regresaramos por donde ellos venían y buscar juntos la entrada al fest. En eso vimos unas luces que venían detrás de nosotros, era una van, ya les hice parada y les pregunté si tenían idea de donde era el pedo o cuanto faltaba para llegar, ni ellos sabían pero pues siguieron su camino y a mi no se me ocurrió más que decirle a los demás que los siguieramos a pie, fue así como encontramos un pequeño camino y vimos una casa o restaurante, las luces estaban apagadas pero se escuchaba ruído a lo lejos y nos internamos por ese accidentado camino, así a oscuras yo con mi lámpara, pero no podía iluminar a todos. Finalmente vimos luces, gente, una carpa blanca enorme y el escenario, ya había dado inicio el festival no se exactamente a que hora pero si inició tarde, algunos me dijeron que a eso de las 4, eran las 6 más o menos cuando llegué al lugar.

La razón por la cuál no daban con el lugar fue por qué estaba en un claro en el bosque, pero como decirles, no estaba al nivel del camino sino en una especie de barranca, vaya unos metros hacía abajo. Total que pregunté donde podía dejar mis cosas o armar mi tienda de campaña antes de hacer otra cosa, a unos metros del escenario había otra zona, tenía que subir por un camino igual de accidentado que por donde llegué e igualmente a oscuras, ya ahí igualmente a oscuras arme mi tienda y me instale. Para mi suerte me topé con el guitarrista de la banda Necrotic, a quienes no conocía y ya me dieron chance de acampar justo a lado de ellos y así tener mejor seguridad para dejar nuestras cosas, fue minutos antes de que ellos subieran a tocar, me preguntó si no sentía frío por que me vió campante con mi playera nada más jajaja, le dije que no, que pensaba que haría más frío y fue cuando me dijo: Pues esperate un rato, igual como caminaste un buen, pero ya lo sentirás. Y vaya que tenía razón, no tenía ni idea del infierno que me esperaba en ese bosque maldito...

3 comentarios:

A. Morales dijo...

Mi hermano,
nosotros le sufrimos pero no tanto. Lástima que no hayamos podido cotorrear en persona. Si se arma el festival en Cancún allá nos topamos, no?

Zombie Ritual Fanzine dijo...

Que pinche aventura!! jajaja! Saludos

Fucktricio dijo...

A. Morales:
Pues si, lástima que no cotorreamos por allá, ni idea que irían al festival y si se arma el de Cancún pues allá estaremos. Ojala y si se haga algo, aunque por la distancia dudo que mucha gente del centro y norte del país se lance. Suerte al organizador.

Víctor:
Te perdiste el desmadre, ni hablar, y la aventura estuvo chida pero muy sufrida. Al final hay que sacar lo bueno de la experiencia, el canijo organizador si que dejó a la deriva a la gente que asistió de milagro no se le murió nadie de hipotermia jajajaja. A ver cuando nos topamos por allá, en febrero Katatonia!!!!