A mis casi recién cumplidos 30 años (gachos no me mandaron regalos ni felicitaciones, eeh no es cierto) debo decirles que me avergüenza el hecho de que siempre ande yo adolorido. Que a veces me cueste trabajo agacharme a recoger algo que se me cayó al suelo o hacer una flexión, no, que decir de mi rodilla si alguien en hollywood la escuchara me grabaría para efectos de película de terror (ya saben por ese "rechinido"). Si así me siento ahora no me quiero imaginar dentro de unos 10 años más, a la mierda el fitness club, bienvenido de nueva cuenta el drink team. Por cierto, ya llego la cerveza Indio a Villahermosa. Gracias Halford (el Metal God).
Nota: Esperen a ver el final, que envidia de verdad.
Nota: Esperen a ver el final, que envidia de verdad.
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