Pero es que este blog no fue creado para contar mis experiencias personales por lo que no me apetece contar lo que hago en mi vida diaria. Pero es que este fin de semana me la pase bien, haciendo a un lado el resultado del partido de la seleción mexicana debo decir que fue un gusto volver a enontrarme y pasar un rato agradable con la "banda", si, esa bandera con la que pase buenos momentos en mi vida de estudiante.
Muchos son los momentos que podría contarles en este espacio, pero son cosas que no vienen al caso en estos momentos además que les van a parecer de lo más triviales pero hay una etapa de la vida en que uno siente que se puede comer al mundo. Todo comenzó con un mensaje a mi cel desde el día jueves o viernes para invitarme a casa de uno de mis cuadernos, ya una semana antes me habían invitado a ir a ver el box, pero esa ocasión no pude ir y la neta si me sentía un poco mal porqué siempre me vienen invitando a su casa y yo nomás me hago del rogar. La cita era como a eso de las 5 de la tarde, pero como la chamba esta dura ahorita salí tarde el sábado apsado así que apenas me dió tiempo de ir a echarme un coyotito y darme un buen baño que ya me hacía falta.
Total me dan las 6 y me llaman que si donde chingados ando y a que hora llego a la "party" porqué ya se esta acabando la chela así que ni tardo ni peresozo me levanto de mi cama y me doy un baño casi, casi, de asiento je, je. Llegando me topo a la banda de casi siempre, no digo nombres para no quemar, más bien porqué pssss no le veo caso además no hay anécdota que tenga relación con un nombre así que... Pues ahi me instalo todos emocionados por el resultado del partido, yo la verdad no tenia ganas de verlo así que me ahorro mis comentarios. Total que ya estando todos ahi pues ya saben empieza el desmadre, las anécdotas, los chistes, la botana, y entre chela y chela, risas y risas se nos fue el tiempo. No faltaron las llamadas a los cuates que no pudieron ir, ah porqué no les he dicho, fue el cumpleaños de un cuate así que ese fue el motivo verdadero por el que decidí lanzarme.
Total, que para no hacerselas cansada porqué nadie sabía que tipo de música escuchar, pues la hice de dj esa noche pero en lugar de música mejor les puse algunos videítos, si de esos que a veces les posteo en este blog para salir un poco de la rutina además de que muchos están de poca. Seguía rolando la chela en el lugar y, como siempre con mis jaladas, pues tuve la ocurriencia de ponerle a mi cuate esa rolita que no falla en los XV años pa´que bailara primero con su domadora y luego con la banda ja, ja, ja. Total que todos pasamos, y luego ya entrados en la materia pues que nos armamos de más chela y valor y al más puro estilo de "Huele A Gas" esa pequeña sala que tantos buenos momentos (y otros no tanto) nos ha dado se convirtió en nuestra pista de baile personal. Si, lo reconozco, esa noche una licuadora de 8 velocidades no me ganaba, ni siquiera un trompo de tacos al pastor pero creo que todos en algún momento, y ya con dos cartones de chela encima nos deshinibimos un poco y más estando entre cuates. Yo soy de esos cuya filosofía de vida es que si quieres hacer algo, lo hagas para que no te quedes con las ganas y luego no te lamentes, no hay que negarse algunos placeres además, no por dar un pasito pa´lante y uno pa´tras, luego una vueltecita y un brinquito vas a ser menos hombre o en mi caso metalero.
Muchos son los momentos que podría contarles en este espacio, pero son cosas que no vienen al caso en estos momentos además que les van a parecer de lo más triviales pero hay una etapa de la vida en que uno siente que se puede comer al mundo. Todo comenzó con un mensaje a mi cel desde el día jueves o viernes para invitarme a casa de uno de mis cuadernos, ya una semana antes me habían invitado a ir a ver el box, pero esa ocasión no pude ir y la neta si me sentía un poco mal porqué siempre me vienen invitando a su casa y yo nomás me hago del rogar. La cita era como a eso de las 5 de la tarde, pero como la chamba esta dura ahorita salí tarde el sábado apsado así que apenas me dió tiempo de ir a echarme un coyotito y darme un buen baño que ya me hacía falta.
Total me dan las 6 y me llaman que si donde chingados ando y a que hora llego a la "party" porqué ya se esta acabando la chela así que ni tardo ni peresozo me levanto de mi cama y me doy un baño casi, casi, de asiento je, je. Llegando me topo a la banda de casi siempre, no digo nombres para no quemar, más bien porqué pssss no le veo caso además no hay anécdota que tenga relación con un nombre así que... Pues ahi me instalo todos emocionados por el resultado del partido, yo la verdad no tenia ganas de verlo así que me ahorro mis comentarios. Total que ya estando todos ahi pues ya saben empieza el desmadre, las anécdotas, los chistes, la botana, y entre chela y chela, risas y risas se nos fue el tiempo. No faltaron las llamadas a los cuates que no pudieron ir, ah porqué no les he dicho, fue el cumpleaños de un cuate así que ese fue el motivo verdadero por el que decidí lanzarme.
Total, que para no hacerselas cansada porqué nadie sabía que tipo de música escuchar, pues la hice de dj esa noche pero en lugar de música mejor les puse algunos videítos, si de esos que a veces les posteo en este blog para salir un poco de la rutina además de que muchos están de poca. Seguía rolando la chela en el lugar y, como siempre con mis jaladas, pues tuve la ocurriencia de ponerle a mi cuate esa rolita que no falla en los XV años pa´que bailara primero con su domadora y luego con la banda ja, ja, ja. Total que todos pasamos, y luego ya entrados en la materia pues que nos armamos de más chela y valor y al más puro estilo de "Huele A Gas" esa pequeña sala que tantos buenos momentos (y otros no tanto) nos ha dado se convirtió en nuestra pista de baile personal. Si, lo reconozco, esa noche una licuadora de 8 velocidades no me ganaba, ni siquiera un trompo de tacos al pastor pero creo que todos en algún momento, y ya con dos cartones de chela encima nos deshinibimos un poco y más estando entre cuates. Yo soy de esos cuya filosofía de vida es que si quieres hacer algo, lo hagas para que no te quedes con las ganas y luego no te lamentes, no hay que negarse algunos placeres además, no por dar un pasito pa´lante y uno pa´tras, luego una vueltecita y un brinquito vas a ser menos hombre o en mi caso metalero.
Al final debo decirles que siempre es un gusto ver a los cuates, a pesar de los años que han pasado y los distintos caminos que hemos tomado, de estar casados, juntados, separados, tener hijos, tener una enfermedad, etc, pero siempre, siempre nos acordamos de los que no pueden estar en esos momentos. Así que si ustedes se han negado el gusto de ver a sus cuadernos de doble raya les digo que nunca faltan los pretextos para juntarse a tomar una chela y pasarla bien. Las fotos y videos se los debo, no llevé mi cámara nunca me imagine como terminaría la madrugada de este pasado fin de semana, nooo!!!, el tún tún se queda pendejo.
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